El mercado de naves industriales en Galicia presenta un
escenario de dinamismo acorde con la situación actual de la economía pero
manteniendo la memoria de los años de apuro que se han vivido recientemente.
En términos generales podemos decir que actualmente la
demanda de naves industriales supera a la oferta, especialmente en naves de
pequeño y mediano tamaño, y esta situación impulsa los precios al alza pero de
manera contenida. En este sentido debemos diferenciar el mercado de compra y
venta del mercado de alquiler, ya que el perfil de la oferta y la demanda, y por tanto su comportamiento, es diferente
En el primero actualmente se observa un cambio radical en el mercado. Se ha pasado
de una época en la que había una gran oferta particular de naves a la venta a
precios muy interesantes para los inversores a otra época en la que la oferta particular
se ha contraído de manera radical y que además muestra precios menos ajustados.
La explicación a esta situación viene dada porque las empresas en apuros ya se
han liberado de parte de sus activos o bien han pasado a formar parte de la
cartera de las entidades financieras, provocando un freno en la caída de los
precios y por tanto un freno del mercado inversor o especulativo. Este cambio
radical en el mercado provoca que los potenciales compradores actúen con
cautela tanteando el mercado en busca de precios que actualmente ya no existen,
por lo que de momento el mercado de la compraventa de naves industriales está
actuando con moderación a pesar de que presenta una tendencia alcista.
Por otra parte en el mercado de alquiler de naves industriales actualmente se
observa con claridad un desajuste entre la oferta y la demanda de naves
industriales en los principales polígonos, con un gran volumen de empresas
buscando instalaciones y una oferta reducida que obliga a muchas empresas a
buscar ubicaciones en el extrarradio de las grandes ciudades o en polígonos de
los anillos secundarios o terciarios. Esta situación es más acentuada en el
segmento de inmuebles más demandados, es decir, de pequeño y mediano tamaño,
provocando un aumento continuo de los precios pero de forma contenida y en
ningún caso al nivel de los precios pre-crisis, que difícilmente volverán a
corto o medio plazo.
Esta situación actual lleva a muchos agentes del mercado a
plantearse si es el momento oportuno para empezar a tomar posiciones en cuanto
al desarrollo de nuevas promociones, y poco a poco podemos observar cierto
dinamismo en el sector de la obra nueva, especialmente en los parques
empresariales de promoción pública que en su momento se han visto obligados a
ajustar el precio de venta de sus parcelas, ya que donde antes solo había maleza
se empiezan a ver grúas y naves nuevas.